La presidenta de la República, Dina Boluarte, ofreció su mensaje a la Nación en el marco de las Fiestas Patrias 2025, un evento que ha generado diversas reacciones tanto en el ámbito político como en la ciudadanía. En un discurso que se extendió por más de cuatro horas, Boluarte leyó un total de 82 de las 97 páginas que componen su mensaje, repitiendo una fórmula que ha sido objeto de críticas en años anteriores. A pesar de la extensión de su exposición, la mandataria no presentó anuncios significativos ni realizó autocríticas sobre la situación actual del país, lo que ha llevado a especialistas a cuestionar la efectividad de su comunicación.
El contexto de la presentación fue marcado por un fuerte despliegue de seguridad, con más de 50 agentes resguardando el trayecto entre el Palacio de Gobierno y el Congreso. Esta medida, aunque necesaria por la situación política del país, también refleja la tensión que rodea a la figura de Boluarte, quien enfrenta un alto índice de desaprobación, con un 96% de rechazo según encuestas recientes.
Durante su discurso, Boluarte abordó temas como la inseguridad y la minería ilegal, pero evitó profundizar en las críticas que ha recibido por su gestión. En un momento, incluso solicitó al presidente del Congreso, José Jerí, que diera detalles sobre una carta del Papa León XIV, lo que generó confusión sobre el enfoque de su mensaje. La presidenta también omitió partes del discurso que contenían compromisos de su gobierno, lo que ha llevado a especulaciones sobre la preparación y la estrategia detrás de su presentación.
Uno de los puntos más destacados fue la falta de autocrítica en relación con el aumento de la violencia y los homicidios en el país. A pesar de que la situación de seguridad ha sido un tema recurrente en la agenda nacional, Boluarte optó por no abordar este aspecto de manera directa, lo que ha sido interpretado como un intento de minimizar la gravedad de la crisis. En cambio, su mensaje se centró en reforzar su apoyo a las bancadas que la respaldan en el Congreso, lo que ha generado descontento entre los opositores.
La presidenta también se refirió a la necesidad de una reforma en el sistema de administración de justicia, un tema sensible dado que ella misma enfrenta investigaciones por diversas irregularidades. Sin embargo, su crítica al Ministerio Público fue omitida durante la lectura, lo que ha llevado a cuestionamientos sobre la sinceridad de sus intenciones de reforma.
En un momento de su discurso, Boluarte se defendió de las acusaciones en su contra, argumentando que ha sido víctima de una narrativa que busca convertirla en el chivo expiatorio de los problemas del país. Esta victimización ha sido un recurso recurrente en su discurso, lo que ha llevado a algunos analistas a calificar su mensaje como desconectado de la realidad.
El discurso culminó con un llamado a la unidad y a la esperanza, pero dejó muchas preguntas sin respuesta sobre el futuro del país. La falta de propuestas concretas para abordar los problemas más apremiantes, como la criminalidad y la corrupción, ha dejado a muchos peruanos insatisfechos. La politóloga Gabriela Vega, en un análisis posterior, calificó el mensaje como una ficción, argumentando que no refleja la realidad del país ni las preocupaciones de la ciudadanía.
Mientras Boluarte ofrecía su discurso, familiares de las víctimas de las protestas que han tenido lugar durante su gobierno realizaron una manifestación en las cercanías del Congreso, lo que subraya la polarización y el descontento que persiste en la sociedad peruana. La desconexión entre el mensaje presidencial y la realidad vivida por muchos peruanos es un tema que seguirá generando debate en los próximos días.
En resumen, el mensaje a la Nación de Dina Boluarte en Fiestas Patrias 2025 ha sido objeto de críticas por su falta de autocrítica y por no abordar de manera efectiva los problemas que enfrenta el país. La extensión del discurso, aunque impresionante en términos de duración, no ha logrado convencer a una población que demanda respuestas claras y acciones concretas ante la crisis actual.